Para mejorar la apariencia y la función de nuestros dientes, elegir la técnica adecuada es crucial;
depende entonces del dentista decidir contigo, aconsejando la que mejor se ajuste a tus expectativas y necesidades estéticas y funcionales a largo plazo. Ya sea para lograr una sonrisa más brillante y/o una mejor salud bucal, saber cuándo empezar—¡y especialmente cómo elegir el método más apropiado—puede resultar difícil!
Para tener una mejor idea de las opciones disponibles y comentarlas con tu dentista, descubre todas las técnicas utilizadas en el mundo de la cirugía dental, incluidas las que usamos en nuestra clínica.
La edad ideal está entre los 30 y 40 años.
¿Sabes por qué? ¡Te lo explicamos!
La pérdida de cabello que generalmente conduce a la calvicie es causada en el 95 % de los casos por una hormona masculina conocida como “dihidrotestosterona”. Cuando está presente en cantidades excesivas, acelera demasiado los ciclos de crecimiento capilar, lo que resulta en alopecia androgénica.
Ten en cuenta que la producción de esta hormona no es constante a lo largo de la vida. Por eso, un trasplante demasiado temprano puede provocar una disminución de la densidad en la zona trasplantada con el tiempo.
Dado que no todas las áreas del cuero cabelludo se ven afectadas por la alopecia, los injertos se extraen de zonas sanas del cuero cabelludo. La calidad y densidad de estas zonas influyen en gran medida en el resultado del implante capilar, ya que los folículos extraídos no volverán a crecer en el área donante. Por lo tanto, la cantidad de injertos está limitada y debe distribuirse de forma armoniosa; de este modo, el cirujano logra un resultado natural y uniforme.
Ahora entiendes por qué es tan importante elegir con cuidado a tu cirujano y clínica de trasplante capilar.
Para rehacer tus dientes, debes acudir a cirujanos dentales que puedan evaluar tu situación y ofrecer las soluciones más adecuadas. Ellos tienen en cuenta varios factores como el estado de las encías, el tiempo de cicatrización, hábitos de fumar, resultados a largo plazo, etc.
Para conocer más sobre las técnicas empleadas en todo el mundo y en nuestra clínica, aquí tienes una breve guía explicativa.
El método quirúrgico en dos etapas es el más comúnmente practicado para rehacer dientes de forma segura, previniendo la inflamación alrededor del implante (periimplantitis).
Con este método, la encía se sutura sobre el implante dental (dejándolo invisible en la boca). Tras 3 meses, se realiza una pequeña incisión para exponer el implante y colocar un tornillo de cicatrización en su parte superior. La encía se cura en torno a este tornillo, creando el espacio que recibirá el pilar y la corona en tratamientos posteriores.
Este método ofrece el mejor resultado estético a largo plazo porque optimiza la adaptación de la encía con el pilar y la corona.
También existe el método quirúrgico en una sola etapa, pero se utiliza con menos frecuencia porque aporta menos ventajas que el enfoque en dos etapas.
Sin abrir la encía, los dentistas pueden rehacer los dientes en los casos más favorables, cuando la cantidad y calidad del hueso son suficientes. En este caso, el implante puede colocarse sin suturas.
Este método consiste en extraer un pequeño círculo de encía, preparar el sitio del implante con una fresa y luego insertar el implante. Se usa poco en las clínicas porque su tasa de éxito a corto, medio y largo plazo es menor.
La extracción dental e inserción del implante pueden realizarse para uno o varios dientes directamente en la clínica, evitando los 3–4 meses de espera tras la extracción. Para ello, el diente a extraer no debe tener infección, la encía debe estar sana y el hueso debe contar con cantidad y calidad adecuadas. También se tienen en cuenta otros factores, como el estado de los dientes adyacentes y opuestos.
Es necesaria un análisis preciso y completo cuando se rehacen los dientes en este escenario. Esto incluye un examen radiológico tridimensional con tomografía por haz cónico y un examen en sillón.
La carga inmediata permite que el paciente reciba una prótesis fija temporal pocas horas o días después del procedimiento—este es el caso de los métodos All‑on‑4 y All‑on‑6.
Esta técnica se utiliza con poca frecuencia porque está recomendada principalmente para una restauración completa del maxilar en lugar de uno o dos implantes. Además, la prótesis fija temporal es más costosa que una removible. Sin embargo, independientemente del precio, ¡creemos que es mejor invertir en un método permanente con marcas y materiales de alta calidad!
Al rehacer tus dientes, es importante planificar con resultados a largo plazo en mente.